Principal
Arriba

Amor como cebo
El toque Hitch
Las madres
Todos somos culpables
La ambigüedad
Información y poder
Uranio 235
Yo Alex Sebastian
Making of Encadenados

 

LA AMBIGÜEDAD

Por Gloria Benito Gómez

Hitchcock, un maestro en el arte de acumular fingimientos que conducen al clímax final.Uno de los fundamentos del suspense es la ambigüedad, que consiste en ocultar intencionalmente una parte de la realidad y mostrar solamente aquella información indispensable para que se desarrolle la historia o el relato. Este arte, en el que Hitchcock es maestro, supone engañar o decir a medias, usar medias palabras o dobles sentidos. En Encadenados, el autor engaña u oculta cosas al espectador, del mismo modo que los personajes fingen o se mienten entre ellos. Alicia Huberman  se muestra ante Devlin cínica y desengañada, pero también tierna y confusa, mostrando al espectador una personalidad contradictoria que oscila entre la apariencia de mujer fría y la necesidad de ser amada. Devlin también se debate entre el deseo y la desconfianza, entre la lealtad a su profesión de espía y el ansia de proteger a su amada. Alicia H. engaña por encargo a Sebastián y a sus acólitos nazis, enmarañando más aún la red de ocultamientos que constituye la trama.  Así, todo es confuso al principio de esta historia y el espectador tampoco se fía de los personajes,  y espera con ansiedad alguna pista o indicio de claridad en la siguiente secuencia. Así es como se mantiene la atención suspendida, o sea se construye el suspense. 

La acumulación de fingimientos aumenta la tensión narrativa y conduce al clímax de la historia, mientras se espera conocer el destino de los personajes, especialmente el de los buenos, con los que el espectador se ha identificado mediante un proceso de  complicidad que le sumerge en la película. El clímax es también el descubrimiento, por parte de algunos, de la mentira de los otros, lo que parece obligado en un filme de espías. A partir de ahí, la acción se acelera y el suspense crece, a medida que se va desvelando paulatinamente una porción de la verdad que se creía bien guardada. El descubrimiento de la traición de Alicia conlleva el debilitamiento de este personaje, tanto por el peligro de perder su vida como por la posibilidad de perder su amor, que ella demanda sin fuerzas. El desenlace se resuelve porque Devlin decide mostrar abiertamente su verdad, es decir, su amor y deseos de salvar a su amada. Y, claro está, lo hace. Los buenos ganan, el espectador respira tranquilo y, puesto que nada queda por ocultar, se acaba la película. 

 

Volver al SUMARIO Página ANTERIOR Página SIGUIENTE Ir a la ÚLTIMA PÁGINA