Sin perdón
Principal ] Arriba ] [ 15 minutos ] Casi famosos ] Esperando al Mesías ] Family man ]

 

15 minutos

Andy Warhol dijo eso de los “quince minutos” de gloria aplicados a (la aparición en) la televisión. Pues, de eso, quiere ir una de las múltiples películas que asoman en esta pedante e insufrible obrita del señor Herzfeld. Si ahí se quedara la cosa, pues bueno todavía podría admitirse, pero no, porque la historia quiere tener “moralina” y de la buena. Pero esa moralina suena a discurso (en su absurdo final) fascista. La cosa va de unos “pirados” venidos de los países del Este para... No se sabe muy bien la razón, aunque la única y definitiva es poner en pie una peli donde los tales individuos se dedican a asesinar a troche y moche. Uno de ellos, que quiere ser director, se dedica a filmar todo. Una serie de cuestiones deben ser tenidas en cuenta, incluso en su peligrosidad:

            a) los psicópatas de otras películas son aquí habitantes de los países del Este, seres que como se sabe (por el filme y la mentalidad de muchos americanos) equivale a “anormales” (¡mira que no haber nacido en el país glorioso de los múltiples estrellas!). La forma en que se presentan es absurda e inadecuada. Durante toda la película se muestran como “anormales” o “drogatas” (no parece, sin embargo, que consuman “pastillas·, ni esnifen nada). ¿Acaso, por eso de las múltiples referencias cinéfilas (el señor Herzfeld) va de conocedor del cine; se intenta imitar al “malo” (y excelente Jack Palance) de Pánico en las calles (inolvidable película) de Kazan?

            b) las situaciones y su resolución carecen de la más mínima lógica. Todo comienza con la conversación (?) demencial en el aeropuerto entre los dos “malos” y el encargado de comprobar los papeles de los que llegan. Pero lo que sigue es mucho peor. Por ejemplo ¿cómo un policía experto (De Niro) es capaz de abrir la puerta de su apartamento y al ver que no hay nadie -pero suponiéndose que algo pasa- dejar la puerta abierta de par en par e irse pasillo adelante para ver si hay alguien? La razón del hecho: para que los malos entren tranquilamente y cuando llega De Niro reciba la sorpresa de que se encuentran dentro. Otro ejemplo ¿cómo admitir que alguien, con policías por todos los lados, es capaz de sorprender a la policía, de huir, de...? De película, claro... Más y más: ¿cómo puede robar, con rapidez y alevosía, la cámara de vídeo el futurible director? ¿cuál es el trabajo del “bombero” Burms ya que no hace más que ir a todas partes con el policía De Niro? ¿cómo los asesinos pueden andar de un sitio a otro como “pedro” por su casa? ¿es posible que escapen tan fácilmente en la persecución de la que son objeto por las calles?

            c) Por si no estuviera claro que la película es “importante” al final, después de unos tantos letreritos de crédito (cuando parte del público se ha ido) se muestra una secuencia -reiterativa como pocas- que explica la “maldad” de los señores televisivos, sólo preocupados por la audiencia.

            d) El tema de la televisión es uno más de los muchos que aparecen en esta (s) historia (s) deslavazada y con ansias de importancia. Es una pena, pero sin saberlo el director -también argumentista y guionista o sea lo que se llama autor total- ha tenido entre sus manos algún tema realmente importante. No original, bien es verdad, porque insisto Herzfeld conoce -parece al menos- el cine. Por ejemplo, el poder de “captar” imágenes, dominar más lo que se graba que lo que se vive, estar influenciados por la temática de la violencia. Algo, claro, que recuerda a Haneke y sus estupendas El vídeo de Benny y Juegos divertidos? Dos película, las del austríaco, que “exponían” las razones -o investigaban el sentido- de la violencia cotidiana.

            e) La ironía es lo mejor del filme, aunque nos queda la duda de si es buscada o casual. Algunas de los bis a bis entre De Niro y Burns son estupendas. Lo que ocurre es que no se sabe si son creaciones de los actores o propuestas del realizador. Aparte de que la interpretación de De Niro (¡que gran personaje perdido en la película!) es realmente insuperable (un actor que va ganando cada vez más con los años). Sinceramente nunca se sabe si estamos en una película seria o en una parodia.

            d) Hay apuntes y apuntes que incansablemente se repiten sin necesidad. El presumible director llegado del Este se “denomina” Frank Capra. No se sabe muy bien porque a no ser por eso de que sus personajes (los de Capra) siempre triunfan. Más bien, pienso, se podía llamar Tarantino. Con todo, la razón del personaje de Capra, a lo mejor está en triunfar en el país de las oportunidades viniendo de fuera. Otro tema, pues: un país que asoma como feliz y en el que encuentran la muerte. Pero, claro, como pueden esperar otra cosa cuando llegan a Estados Unidos a sangre y fuego. Nueva vuelta de tuerca que nos llevaría al primer apartado: ambos son de antiguos países del Este, uno incluso ruso (el otro no puede admitir que le hable en ruso. Exige, claro, que le hable en ingles de América, que es lo suyo). O sea que, su destino (universal), parece ser el apropiarse de los Estados Unidos.

            e) el final es fascismo puro. Hay que tomarse la justicia por la mano ya que las leyes son absurdas y lo único que permiten es poner en libertad al delincuente. Un plan perfectamente tramado (¡y el malo-malo parecía estúpido!) por el “inteligente” de la pareja. Nada mejor para terminar con un mundo de corrupción (abogado incluido) que matar a los que se comportan mal. Para eso están los honrados defensores de la ley... aunque sean una especie de inspectores de bomberos (vuelve otra vez el recuerdo de Pánico en la escena como referente primario de este título. Allí también había una pareja empeñada en evitar la catástrofe -eliminar la peste, en aquel caso- formada por un policía y un oficial médico).

            f) Y para remate, es decir para dar verosimilitud a la cosa se hace que algunos personajes que tienen que ver con el medio televisivo intervengan se interpreten a si mismo. Se intenta ironizar con los propios programas que emiten. Parodia de parodia. También se permite (el director) jueguecitos como es que aparezca en una escenita de nada la hoy afamada C. Theron. A ver quien consigue descubrirla. ¿Cuál es la razón de su presencia? Probablemente que pasaba por allí (por el rodaje) o que Herzfeld le prepuso la broma de su aparición, ya que fue él (el dire) quien la hizo saltar a la fama hace unos años al darle el papel de protagonista en Dos semanas en el valle.           

            Pobre y larga película, que demuestra la inutilidad de un cine que no sabe por donde camina. Habrá que esperar nuevas películas de Herzfeld (pero a a ser posible que no escriba el guión) para ver hacía donde camina este chiquito. A lo mejor resulta que tras su violencia se esconde un buen comediante. ¿O acaso trata de imitar el (triste) cine de Tarantino? Todo es posible.

 Mister Arkadin                

15 minutes. 

Nacionalidad: EE. UU, 2000. 

Argumento, guión y dirección: John Herzfeld. 

Interpretes: Robert De Niro, Edward Burns, Vera Farmiga, Kelsey Grammer.

 

Volver al SUMARIO Página ANTERIOR Página SIGUIENTE Ir a la ÚLTIMA PÁGINA
 

Principal ] Arriba ] [ 15 minutos ] Casi famosos ] Esperando al Mesías ] Family man ]