Engañados como chinos

Si por un momento tomamos la gastronomía para aplicarla a esta película en concreto tenemos un simple menú de comida china del restaurante de la esquina. Todo mezclado a pedacitos, la carne, el pescado y la verdura, no sabes quÉ es cada cosa. Recurres a esta alimentación porque es rápida y accesible cuando no tienes nada mejor a mano. Claro que su mayor problema –sin mencionar los estomacales que algunas provocan, y Ésta lo hace- reside en que de entrada llena, pero al poco tiempo uno está de nuevo hambriento, como si no hubiera comido.

Para aquellos que piensen en el buen cine como una reflexión espectatorial, Zu warriors puede resultarles una obra de arte. La necesidad de que el público piense está llevada al extremo, en este filme tan metafísico. ¿Quién es ese? ¿A dónde va? ¿Por qué lo hace? Comprender algo es un trabajo de chinos.

Zu: guerreros de la montaña mágica, fue dirigida en 1983 por Tsui Hark y es la película original del mismo autor en la que está basada la que aquí se comenta. Un remake absurdo en el que los efectos especiales parecen más los de la original que hechos en la actualidad. Desconozco la antigua, pero si los acontecimientos narrados son los mismos, dudo que funcionase, son tantos que al menos darían para una trilogía.

Se intuyen historias de amor, de poder y de honor. La presencia del bien y del mal, esa lucha eterna. A partir de ahí que cada uno interprete lo que le apetezca. El parecido con Tigre y dragón se encuentra en el blanco de los rasgados ojos de sus protagonistas. Si con alguien tiene similitudes es con los dibujos Bola de dragón y Los caballeros del zodiaco, pero salvando las distancias, estas series de animación tenían unos guiones mas sólidos y verosímiles. Y aunque lo mas fácil sería echarle la culpa de tanta incomprensión a su productor, “Manostijeras” Weinstein, que para su distribución occidental ha reducido la cinta de 104 a 80 minutos, es preferible darle las gracias por evitar un sufrimiento más prolongado.

Zu warriors, tiene una estruendosa y grandilocuente música omnipresente y omnipesada, y carece por completo de fuerza visual (y de total interés). Mala planificación, constante, que se ancla ya en la tradición de contratar al Sr. Miyagi para que haga la grulla colgado de cables, una acción que puede durar cinco segundos, y segmentarla en cincuenta y siete planos. ¿Por eso llaman a Tsui Hark maestro del cine de acción? Miedo me da conocer a sus discípulos. En fin, a quien le digan que es un maestro le han engañado como a un chino.

Israel L. Pérez

Título original: The legend of Zu.

Director: Tsui Hark.

Producción: Tsui Hark, para China Star Entertainment, FilmWorkshop y One Hundred Years of Film.

Guión: Choi Lee Man y Tsui Hark.

Fotografía: Hang-Sang Poon.

Música: Ricky Ho.

Intérpretes: Ekin Cheng, Louis Koo, Cecilia Cheung, Zhang Ziyi.