| HUIDA HACIA EL SOL (películas
malas)
| Varios títulos indican que no estamos
(ya se sabe las Navidades) en buenos tiempos cinematográficos. Nada menos que se han
presentado en sociedad la "tonta" Hora punta de Brett Ratner a mayor
gloria del cine de tortazo y tente tieso con (insanas) pretensiones
aventureras-humorísticas (vamos, en la línea de las películas de Eddie Muphy pero en
peor, lo cual ya es decir demasiado), Por siempre jamás de Andy Tennant o
el cuento de la cenicienta en versión infantiloide pero acorde con los tiempos (es decir
con un cierto tono de feminismos), el batacazo de la Dreamworks, la productora de
animación de Spielberg con la (más que) disneyana El príncipe de Egipto,
versión comprimida de Los diez mandamientos (y en dibujos animados) y donde el rey
Midas del cine lanza su (archisabida e incongruente) artillería pseureligiosa (pintora de
toda su obra) llena de "comprensión" (para hacer taquilla) para con todas las
religiones (la Santa Sede la ha recomendado estas Navidades), 54 de Mark
Chistopher, una versión descafeinada de la célebre (y escandalosa) discoteca neoyorquina
(ni ficción, ni documental), Prácticamente magia de Griffin Dunne (Adictos al
amor) donde asistimos a una "ñoña" historia de hermosas brujas hechizadas
y hechizadoras (nunca "fermosas" señoras -la Bullock y la Kidman- fueron tan
mal servidas), Madeline de (¡ahí queda el nombrecito!) Daisi von Scherler Mayer,
una historia con niñas inaguantables y pesadas, la incongruente Vuelve a casa por
Navidad, si puedes... (¿habrá alguien que vea tamañas cosas?) de Arlene Sanford. |
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