¿Quién engañó a Roger Rabbit? (Who framed Roger Rabbit?, 1988) de Robert Zemeckis

  27 Mayo 2014

La originalidad que la hace única

roger-rabbit-1Es una explosión de ingenio, desde el propio guión hasta la estética noir y esa mezcla original e interesante de personajes y dibujos animados. Con un Bob Hoskins siempre a la altura de los personajes que interpreta, en este film da vida a Eddie Valiant, un detective que en su día fue muy prestigioso pero que desde el asesinato de su hermano a manos de un dibujo animado, el alcohol y la tristeza acabaron por quebrar su carrera profesional.

A Eddie se le presenta la oportunidad de trabajar para la productora de cine Maroon, que es una de las más fuertes del momento, para investigar el romance que la esposa de su gran estrella, Roger Rabbit, mantiene con Marvin Acme, el dueño de ciudad animada; lugar donde todos los dibujos animados residen.

Todo se tuerce cuando al poco Roger Rabbit es acusado del asesinato de Marvin Acme. Roger pide ayuda a Eddie que, bastante renegado debido al odio que tiene por los dibujos animados tras la muerte de su hermano, acepta de buena fe ayudar al famoso conejo.

Tras varios intentos del malvado Juez Doom, nuevo dueño de ciudad animada, por establecer el orden y hacer desaparecer a Roger Rabbit con lo que se conoce como la salsa (única fórmula que hace desaparecer a los dibujos animados), Eddie consigue salvar a la ciudad animada de los malévolos planes de Doomque,  tras descubrir que en realidad era también un dibujo animado y fue quien en concreto mató a su hermano, consigue que la salsa acabe por “desdibujarlo” y trayendo la felicidad de nuevo al lugar en el que habitan los alegres dibujos.

La estética mezcla el film noir de los años cuarenta, con un argumento sórdido, en el cual los personajes sufren las consecuencias de vivir en una sociedad corrupta, donde por la avaricia y el poder se quita de en medio a todo aquel que pueda suponer un obstáculo. También su estética nos lleva al más puro cine negro, con ese tenebrismo de la luz, esos escenarios oscuros y marginados.

Pero por otro lado encontramos elementos que lo alejan de ese tipo de cine, como es el toque de comicidad y desenfado que le dan los dibujos animados, que sin duda contrastan sus colores vivos y sus movimientos alocados, con ese tenebrismo y movimiento pausado de los elementos pertenecientes al “mundo real” o,  por así decirlo, al mundo que no ha sido creado por ningún dibujante.

Para más inri, ese final feliz con todos los dibujos y habitantes de ciudad animada haciendo coro y pasillo a las dos parejas protagonistas (Roger y Jessica por un lado y Eddie y Dolores por otro) encaja más con el cine de los felices años veinte.

rr-mickey bugs and eddie

Disney y Warner mano a mano

¿Quién engañó a Roger Rabbit? ha sido la única película en la historia del cine que ha conseguido juntar en el mismo encuadre a clásicos personajes de Disney con los simpáticos Looney Toones, y es que esta joyita de Hollywood costó algo más de setenta millones de dólares en el año 1988, convirtiéndola en una de las películas más caras de la historia; pero sin duda una de las más rentables, consiguiendo recaudar más de ciento cincuenta millones de dólares.

La productora encargada de lanzar este blockbuster fue Walt Disney y sorprende, de hecho, que fuera tan condescendiente para repartir protagonismo con su rival más fuerte, la Warner Bros, pero es que ésta no fue la única productora que exhibió a sus simpáticos dibujos, también aparecen personajes de la Metro Goldwyn Mayer, Universal, Paramount, Republic Pictures y Turner Entertainment.

Evidentemente, a más inversión, más tiempo en pantalla, pero Disney se aseguró de que la Warner no le fuera a hacer demasiada sombra y por ello acordaron que Mickey Mouse y Bugs Bunny (los dos personajes más populares de ambas productoras) tuvieran el mismo tiempo en pantalla y la misma cantidad de diálogos, apareciendo incluso juntos en un mismo plano.

La batalla entre ambas productoras se representa con una escena en la que el Pato Donald (Disney) y el Pato Lucas (Warner) tienen un duelo tocando el piano. El Pato Lucas se burla de la forma de hablar del siempre malhumorado Donald exclamando “¿alguien entiende lo que dice ese pato?”. Al final los dos populares patos tienen una pelea descomunal que hace al público morirse de la risa y al propio Marvin Acme, dueño de la ciudad animada, reconocer que “estos patos son graciosos, nunca terminan el acto”, del mismo modo que nunca terminará, a pesar de excepcionalmente compartir pantalla en este largometraje, el duelo entre las dos grandes productoras de dibujos animados.

rr-Juez Doom

Mucho más que cartoons

Casi todos los personajes tienen una doble cara, no aparentan lo que a simple vista se puede ver. De eso ya se nos advierte en la primera escena, en la que se muestra un supuesto episodio donde Roger Rabbit trata de salvar la vida del adorable bebé regordete Herman, que en su intento por coger una galleta de lo alto de una nevera, destroza todo cuanto hay a su alcance. Cuando el director Raoul J. Raoul grita “¡corten!” el tierno bebé se convierte en un grosero y engreído fumador con voz de camionero desgastado, de cuya boca sólo salen lindeces más propias de un soez jugador de rabino de bar de domingo.

Por si fuera poco, además de su afición por el tabaco, también tiene la lívido subida, tanto que él mismo reconoce “mi problema es que tengo el deseo de uno de cincuenta y el pito de uno de tres”. Sin embargo, y a pesar de sus muchos defectos, tiene un buen fondo y la gran amistad que le une con Roger Rabbit le lleva a no dudar nunca de él e incluso a tratar de convencer a Eddie de la inocencia de su amigo.

No es sorprendente, pero no por ello deja de ser una idea ingeniosa, que tratándose de metacine, los personajes cambien en frente de la cámara respecto de cómo son en su día a día, pero sin duda lo que choca es que esos personajes sean dibujos animados.

Algo similar ocurre con el taxi Benny, el cual, tras esa apariencia afable y sonriente se oculta un alocado conductor (de sí mismo) que no obedece ninguna norma de circulación, que ha sido arrestado por suponer un peligro en vías públicas y que además usa la violencia verbal contra todo aquel que se entrometa por su camino.

Pero al igual que el bebé Herman, Benny es también un gran amigo de Roger y le ayudará a salvarse de las manos del malvado Juez Doom. Además, nos ofrece uno de los planos más originales y nunca vistos en la historia del cine: un coche (él, Benny) conduciendo un coche, paradójico pero chistoso.

La que sin duda no aparenta realmente lo que es, es la despampanante Jessica Rabbit, que tiene una aparición espectacular en el film con una escena en la que canta y se pasea por el público seduciendo a todos los allí presentes y en especial a nuestro protagonista Eddie, que no puede dar crédito a que esa belleza sea la mujer del conejo Roger. La sensualidad y la provocación son sin duda sus dos puntos fuertes, tanto que hasta se le dedica un primer plano de sus pechos y tal es su descaro que llega a mirar directamente a cámara en más de una ocasión.

rr-Babyherman

Pero tal y como ocurre con el bebé Herman, lo que vemos no es lo que es, y aunque su aspecto de mujer fatal lo use a su favor en ciertas ocasiones en que flirtea para conseguir algo a cambio, incluso cuando trata de convencer a Eddie de que es inocente dejándolo hasta en paños menores, no es la manipuladora y malvada esposa que todos piensan y por eso se defiende justificando que “no soy mala, me dibujaron así”. Ella es “un peón más”, es decir, que dentro de la trama que Cloverleaf tiene entre manos para hacerse con el control de la ciudad animada, ella está siendo igualmente utilizada y amenazada para que aparente tener una relación extramatrimonial con Marvin Acme.

Lo cierto es que este personaje se popularizó mucho en su día y no era extraño encontrar en las fiestas de disfraces alguna Jessica sexy. Lo curioso es que las características del sensual dibujo no fueron elegidas al azar, sino que se inspiraron en grandes artistas de la historia del cine y del espectáculo. Sus piernas largas y esbeltas las tomaron de “la chica de las piernas del millón de dólares”, Betty Grable. Sus exuberantes pechos pertenecen a Jayne Mansfield, el torso y las nalgas son de la mítica Marilyn Monroe y esa melena pelirroja y abundante tiene su inspiración en Verónica Lake.

En la ficción, Roger Rabbit es el dibujo animado más exitoso del momento (junto con Goofy, tal y como se mencionará varias veces en la película, donde Roger Rabbit llega incluso a idolatrar al famoso perro exclamando “nadie aguanta un golpe como Goofy, ¡qué temple, qué elegancia, qué genio!”).

No tiene, quizás, una doble cara tan evidente como el resto de los personajes mencionados; pero sí puede comprobarse cómo delante de las cámaras o delante del público se muestra alegre, sonriente y divertido, mientras que en su entorno está triste y decaído por el supuesto romance que su esposa Jessica tiene con Marvin Acme. Se caracteriza por ser hiperactivo, muy expresivo y por tener buenos sentimientos. Está locamente enamorado de su esposa y a lo largo de la película se va creando una gran amistad entre él y Eddie.

Ambos personajes están unidos por el dolor que llevan dentro (Roger por la infidelidad de Jessica y porque su vida corre peligro de muerte, mientras que Eddie no levanta cabeza desde la muerte de su hermano). Roger conseguirá que Eddie vuelva a confiar en los dibujos animados e incluso supone para éste un ejemplo de cómo afrontar los problemas, puesto que mantiene siempre la alegría a pesar de que por dentro el miedo lo consuma. Roger le enseña que “una risa es algo poderoso. A veces es nuestra única arma”. La amistad llega a su punto máximo cuando, frente al rechazo inicial de Eddie por el beso que Roger le da al principio de la película, será él mismo quien bese a Roger tras rescatarlo de la salsa del juez Doom al final del film.

rr-Eddie and Roger

Una sociedad de engaños

Pero no son solamente los personajes animados quienes tienen una doble cara. La peculiaridad de la película es que la mentira está siempre presente y el todas las áreas.

El argumento gira en torno a una mentira, en la cual la empresa Cloverleaf arma toda una trama para hacerse con el poder de todas las grandes compañías de Los Angeles, desde la empresa de transportes hasta la ciudad animada. No está tampoco elegido gratuitamente este argumento, pues tiene su origen en una conspiración real llevada a cabo en los años cuarenta por las empresas General Motors, Chevron Corporation y Firestone, que se unieron para hacerse con el transporte de Los Angeles, antes propiedad de Red Car Trolley.

Eddie, Roger y Jessica son engañados primero por el dueño de la productora Maroon, que a pesar de ganar dinero a espuertas gracias a la superestrella Roger y otras grandes estrellas del mundo de los dibujos animados, no duda en delatar a Roger por más dinero todavía e involucrarlo en un caso de asesinato del también engañado Marvin Acme, al que matan para quitárselo de en medio, ya que era el dueño de ciudad animada y es ahora Cloverleaf la interesada en hacerse dueña de ella.

Sin embargo, la avaricia rompe el saco; y paradójicamente el productor de los estudios Maroon es a su vez asesinado por el Juez Doom, que está detrás de la empresa Cloverleaf y a la que le interesa hacerse con el poder de todos los negocios importantes de Los Angeles, incluido, cómo no, los estudios que más fortuna reciben, los estudios Maroon.

Queda así probado que la propia justicia es un engaño. Representada por el Juez Doom, al que se le da el derecho de hacer y deshacer a su antojo todo lo que esté en relación con la ciudad animada y en el cual se confía para implantar el orden y devolver la tranquilidad a Los Angeles, resulta ser uno de los grandes implicados en la trama. Su único objetivo es enriquecerse con la destrucción de ciudad animada para construir una autopista y centros recreativos, con gasolineras que le garantizarán un negocio seguro, ya que el resto de carreteras se cerrarán, el tranvía (que ahora le pertenece) cortará su línea a Pasadena y tal y como él dice “por fuerza la gente tendrá que pasar por ahí”.

Pero el espectador no deja de sorprenderse tanto como los propios protagonistas cuando descubre que el mismísimo Juez Doom es un dibujo animado más y por tanto sólo la salsa podría acabar con él, haciendo que su propia pócima milagrosa se vuelva en su contra.

rr-Juez doom 3

Los creadores

La película se inspiró en el libro Who censored Roger Rabbit?, del escritor Gary K. Wolf. Aunque la esencia de la historia y los personajes humanos son los mismos, tiene varias diferencias con respecto a la película.

A diferencia de ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, que está ambientada en los años cuarenta, el libro se desarrolla en el presente (fue escrito en 1981). En el libro los dibujos no son personajes famosos de animación de películas y series televisivas, sino famosos personajes de cómics (podemos encontrar, por ejemplo, a Snoopy, Dick Tracy, Blondie o Beetle Bailey). En el libro no existe la famosa salsa, pues los personajes animados corren peor suerte y pueden morir a balazos.

El nuevo giro del guión vino dado por Jeffrey Price y Peer S. Seaman, guionistas del famoso largometraje. Al cargo de la dirección estuvo el alabado Robert Zemeckis, que vivía un momento muy importante en su carrera como director, ya que en 1985 había dirigido la primera parte de la saga Regreso al futuro y había supuesto todo un éxito. Zemeckis es además conocido por otros grandes y posteriores títulos del cine como las otras dos partes de Regreso al futuro (rodadas en 1989 y 1990 respectivamente), Forrest Gump (1994), Contact (1997) o Náufrago (2000).

La carísima película fue lanzada por los productores ejecutivos Steven Spielberg y Kathleen Kennedy. No es la primera vez que Speilberg y Zemeckis trabajaban juntos, pues tras el cortometraje A field of honor rodado como proyecto fin de carrera de Zemeckis, y que consiguió el Student Academy Award de la University of South California, Spielberg se fijó en él como director y juntos han colaborado, además de en ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, en varias películas como Locos por ellos (1978) y toda la saga de Regreso al futuro.

Debemos el magnífico y laborioso trabajo de animación a Richard Williams, que al igual que Zemeckis, tuvo su reconocimiento siendo muy joven con su mediometraje The little island, que le valió un BAFTA a mejor película de animación. Desde su estudio de Londres dirigió la serie de televisión animada A Christmas carol (curioso es que la adaptación en cines fuera llevada a cabo por Robert Zemeckis en 2009). Pero sin duda su gran trabajo y el que le valió el reconocimiento de la Academia con el Oscar fue ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, con la que consiguió dos estatuillas, una a mejores efectos especiales y otra un Oscar especial por sus logros en el film.

Otro Oscar se lo llevó Alan Silvestri, compositor habitual en las películas de Zemeckis. En la banda sonora de la película podemos apreciar ese suave sonido de trompeta de jazz que acompaña al personaje de Jessica y que la envuelven de sensualidad, intensificando el erotismo que su personaje representa. También el contraste con la música alocada y alegre que acompaña a todos los dibujos animados (incluidos episodios televisivos) en general y a Roger Rabbit en particular, sin olvidar la bonita canción que todos los dibujos de ciudad animada cantan abriendo pasillo a las parejas protagonistas al final de la película “Smile, Darn Ya, Smile”, y que contiene el mensaje y lema de los alegres dibujos: en la vida hay que sonreír.

Escribe Gala Gracia Mercado

rr-ending