Obuxofest XII, Cine extraño y de terror

  28 Julio 2013

El pequeño gran festival de terror 

obuxofestCada año a finales de agosto el Obuxofest nos visita en Javierrelatre, una pequeña aldea de la provincia de Huesca. El pueblo tiene apenas noventa habitantes en verano, pero el festival es sin duda el evento del año. Muchos jóvenes llegan de fuera para acampar nada menos que en el antiguo cementerio, a la luz de la luna y acercarse a la carpa y el Club Manoli para las proyecciones y por la noche… fiesta ¡cómo no!

El Obuxofest cumplía este año su 12ª edición y ha estado cargado de terror y humor, dos ingredientes imprescindibles y que son la marca de la casa, que se define como "el festival de cine extraño y de terror".

Entre las muchas actividades que hubo a lo largo del fin de semana (del 30 de agosto al 1 de septiembre), cabe destacar las proyecciones de cortometrajes que competían por el premio Obuxo y la verdad es que la elección del jurado no ha sido nada fácil, pues de entre los 26 cortometrajes seleccionados, había mucho nivel, en cuanto a originalidad en sus guiones como a la realización de los mismos.

El ganador finalmente resultó ser El otro, dirigido por Jorge Dorado y que cuenta la historia de Jorge, un hombre que vive en una caravana en un bosque apartado de toda civilización. Una mañana que pasa por el pueblo conoce a la nueva habitante, Daniela, una guapa argentina que trabaja como camarera. Al día siguiente misteriosamente aparece en un bosque lleno de nieve y Daniela ha desaparecido; él la buscará sin descanso hasta encontrarla.

El viernes por la noche nos lo pasamos en grande con la proyección de The Rocky Horror Picture Show, que cumple su ya casi 40 aniversario. La película vino acompañada de actores que se habían disfrazado de los protagonistas de la película e interpretaban las escenas con los mismos bailes y coreografías, pero con el añadido de que el público entero participaba y parecía que todos juntos formábamos parte de ella. También nos proporcionaron una bolsa con objetos que hay que usar en determinados momentos de la película. Nada nuevo para los amantes del film, que tiene sus propios seguidores alrededor del mundo y siempre repiten los mismos rituales.

El sábado se proyectó Rojo oscuro, la mítica película del italiano Dario Argento que narra la historia de Hemmings, un compositor inglés que presencia en Roma el brutal asesinato de una médium y tratará de descubrir quién es el artífice de tal acto de crueldad.

A medianoche tuvimos la oportunidad de presenciar una boda gótica en vivo y en directo, con unos novios que parecían sacados de la misma película de Drácula, con música lúgubre y todo muy siniestro; pero lo mejor, sin duda, fue el público, que no podía llegar a creerse que se trataba de una boda real y no una simple simulación, como muchos creían que sería.

walkie-talkie

El domingo, con la resaca de muchos de los visitantes, el día fue algo más tranquilo. A mediodía se proyectó el ganador del Premio Simón 2013 al mejor cortometraje Walkie talkie", de Rubén P. Barrena, además se trata de un cortometraje muy acorde al festival, puesto que cuenta la historia de dos chicas extranjeras que visitan España y paseando por un desierto dan con un hombre que las maltrata hasta acabar con la vida de ambas.

Antes de la hora de comer disfrutamos de un vermú popular por cortesía del festival y a las cuatro y media estábamos todos listos para la cita más esperada: la proyección de los videominutos que el propio público del festival había realizado con sus amigos.

Nos reímos y disfrutamos viendo a la gente haciendo tonterías y comprobando que la imaginación llega hasta lugares insospechables. El ganador fue Goodbye Orange, de Daniel Canelo, una divertida historia donde un aséptico productor niega la existencia de extraterrestres. Al final, comprobamos cómo la peculiar naranja que adorna el paisaje de Javierrelatre sale volando por los aires, cual nave espacial que vuelve a su planeta.

En cuestión de una hora el pueblo queda de nuevo con los pocos habitantes de siempre y todos llegamos a casa con una sensación de pena seguida de un golpe de emoción por volver a disfrutar el año que viene con más humor, más terror, más delirio, más friquismo… más Obuxo.

Escribe Gala Gracia Mercado

el-otro