"Se lleva a la cama a todo lo que se mueva". Con estas palabras definía una empleada doméstica cómo se comporta Billy Bob Thornton cuando su mujer, Angelina Jolie, no está delante. La crisis de la pareja, ya anunciada hace tiempo, puede desembocar en ruptura matrimonial, aunque Angelina, para tratar de evitarlo ha puesto todo de su parte y, además de olvidar, le ha enviado a una terapia sexual: "el problema es -asegura otra amiga dela familia- que también se ha tirado a la terapeuta". Si Angelina decide pagarle con la misma moneda aquí disponemos de una amplia lista de teléfonos a la que poder acudir... el mío entre ellos.

The Magdalene sisters de Peter Mullan se alzó con el león de oro en Venecia. Cuenta las vicisitudes de unas "jóvenes aunque sobradamente preparadas" mozas irlandesas que deben pasar buena parte de su vida en internados para señoritas... de ahí que hayan aprendido tanto. 

"Con mi película quería decir que la Guerra Fría no sirvió para nada... y dar un punto de vista americano sobre la historia del heroísmo cotidiano". Las palabras de la directora de K-19 sirven para dejar claro que aquí quien tiene un punto de vista son los americanos... ¡¡aunque sea sobre el heroísmo de unos marineros rusos atrapados en un submarino nuclear!! Efectivamente, ahora lo sabemos, también había héroes en la Unión Soviética... aunque bajo "el punto de vista" de la película de la señora Bigelow (ex-señora de James Cameron, por cierto) todos esos marineros eran borrachos, sucios y torpes incapaces de distinguir un periscopio de una botella de vodka (bueno lo distinguían porque ésta última casi siempre estaba vacía). Eso es honradez en el "punto de vista", sí señor.

Albert Boadella y Els Joglars producirán, dirigirán, interpretarán, escribirán y, en definitiva, se mofarán todo lo que puedan de la figura del generalísimo en la película Franco, que comienza a rodarse este mismo mes... si la autoridad competente no lo impide. Sabiendo, como sabemos por sus obras sobre Dalí o Jordi Pujol, que Boadella y los suyos dan caña a todo lo que les cae entre manos (sus buenos juicios les ha costado, por cierto), que vayan preparándose aquellos que fueron ministros con Franco y hoy soy demócratas de tomo y lomo (o de leche y ostras, igual da) porque Boadella promete no olvidarse de ellos (ni de algún familiar suyo, quizás). 

Después del revuelo armado por la familia de María Félix, que obligaron a exhumar el cadáver para demostrar que había sido envenenada por su secretario y heredero universal (cuyo nombre no podemos reproducir por cuestiones legales), resulta que todo es falso. La "Doña" murió como cualquier hijo de vecino, de un ataque al corazón... al parecer lo tenía algo dañado por una vida pródiga en, esto, en, ejem... bueno, una vida achuchada. Y punto.

Tom Cruise (el guapo) ha apadrinado el regreso a las pantallas de La guerra de los mundos, la (inmortal) obra de H. G. Wells llevada al cine en los años cincuenta por el (olvidado) cineasta Byron Haskin. Algunos hablan de cinefilia, otros de invertir para que hacienda no se lo lleve todo... lo que nadie ha dicho es que esta película llega en el momento oportuno, porque la situación de "guerra fría" que se vive tras el 11-S es la misma que se vivía tras el "telón de acero". Sólo hay que cambiar rojos por moros y todos tan contentos. En definitiva, que estamos ante otra campaña para que desconfiemos del vecino... sobre todo si viene del sur.

El príncipe Felipe ha tenido varias citas con la actriz Gwyneth Paltrow, según publica el diario sensacionalista británico The Daily News. (SIN COMENTARIOS)

El príncipe Felipe ha tenido varias citas con la actriz Gwyneth Paltrow, según publica el diario sensacionalista británico The Daily News. (LAMENTAMOS NO PODER HACER MÁS COMENTARIOS, PERO ESTA PUBLICACIÓN, PESE A SU DECLARADA INDEPENDENCIA, TAMBIÉN TIENE SUS LIMITACIONES. USTEDES PERDONEN.)

El que tiene el cine americano sobre todo lo que ellos no han hecho o ganado, incluido el fútbol (que ellos, despectivamente, llaman soccer), los toros, la Champions League, el campeonato mundial de baloncesto o el heroísmo soviético en la Guerra Fría (más información en la letra "K").

Los Oscar cambian de fecha. Ya no se entregarán la tercera semana de marzo, sino un mes antes. Según Bruce Davis (el presidente de la Academia) "es por el largo plazo que va desde que acaba el año hasta que se nominan, en febrero, y luego se entregan, en marzo". No es cierto, insisto, no es verdad que las multinacionales hayan presionado a la Academia aduciendo que como tienen que pagar grandes campañas (además de sobornar a los honorables miembros, se entiende) les sale muy caro optar a la estatuilla: "al menos así ahorramos un mes en periódicos -ha declarado un anónimo productor ejecutivo- porque al final sabemos que se lo va a llevar la última producción de Dreamworks". Vaya, y yo que pensaba que en estos fastos no había ni trampa ni cartón, sólo oropeles.