El testamento de la mujer que canta
El director canadiense Denis Villeneuve ha conseguido su definitiva internacionalización gracias a Incendies y su nominación a los Oscar como mejor película de habla no inglesa.
Íntegramente basada en la dramaturgia homónima de Wajdi Mouawad (co-guionista junto a Villeneuve), Incendies es un viaje a la tragedia a partir de los últimos deseos de una madre que ha vivido mentalmente enajenada los últimos meses de su vida.
Con la mediación de un notario (Rémy Girard), los gemelos Jeanne (Mélissa Désormeaux-Poulin) y Simon (Maxim Gaudette) reciben la voluntad de Nawal (Lubna Azabal), que se niega a ser sepultada de manera digna a menos que se restituya la verdad sobre el pasado de la familia y sus hijos entreguen dos cartas. Una al padre que creían muerto, y otra al hermano cuya existencia desconocían.
Como contrapeso a la negativa de su escéptico hermano Simon, Jeanne emprende un viaje iniciático a Oriente Medio. En la tierra natal de su madre descubrirá la verdadera identidad de Nawal Marwan, una feroz resistente durante un período de guerras entre religiones que aluden, sin acabar de pronunciarlo, al conflicto libanés.
Con un sentido de la adaptación fiel (y tal vez poco independiente), la obra de Villeneuve es totalmente deudora de la gran capacidad de Mouawad por sembrar en la trama de una historia actual las semillas esenciales de la tragedia antigua.
Incendies habla de la búsqueda siempre dolorosa de la verdad, del arrebato y la mutilación de los vínculos esenciales, de la perversión entre razón y emoción y viceversa; de la supervivencia durante el horror, al fin y al cabo, pero sin que la guerra, con sus estallidos de horror y sus vertidos de sangre, gane terreno a los silencios, a las miradas, a la reflexión silente de un rostro que refleja como puñaladas sobre la imagen los cambios constantes e irreversibles que la cruda realidad opera en un alma en plena odisea por su supervivencia.
El film cuenta con un reparto logrado donde brilla lo femenino. Lubna Azabal (Paradise Now, Exils) y Mélissa Désormeaux-Poulin, que debuta en una película internacional, acaban repartiéndose equitativamente un protagonismo paralelo y por momentos simbiótico. Es un acierto vincular el descenso a los infiernos de la madre a la telemaquia de la hija que, en el deseo de poder restituir la dignidad al cadáver materno, encuentra su propia maldición.
Densa en su fondo pero no en su forma, Incendies sufre del sentido creciente y detalladísimo del drama que intuimos en su precedente teatral. Es una lástima que Villeneuve no haya sido más exigente respecto a la potencia de su versión cinematográfica.
Lo mejor del film es sin duda su historia, lo cual no quita que veamos lo peor en un montaje que no acompaña el ritmo de nuestra emoción ni de nuestra empatía hacia ella. El ritmo monótono y un tanto abandonado en el que se suceden las escenas nos distancia un poco de lo contemplado, con la fatal sensación de que a medida que se acerca el clímax, nuestra incredulidad sigue algo despierta, anulando la posibilidad de una catarsis que obtuvo ovaciones cerradas en casi todas las funciones de su montaje teatral (2009).
Quizás era imposible pretender superar el estilo original de Wajdi Mouawad, cuya pieza Incendies completa una profunda tetralogía de la esencia humana en espejo directo con la tragedia griega. “Su teatro supera al cine en flexibilidad narrativa”, firmó el crítico Javier Vallejo. Y probablemente sea esa flexibilidad la carencia más destacable del film de Villeneuve, sin intención de desmerecer el poder de alguno de sus momentos.
Al margen de su traslación a una guerra a escala real, el film comparte la esencia de la obra original. Incendies camina hacia el descubrimiento de un retrato, y la profundidad de éste nunca llega a su máxima capacidad ni es proporcional al grado de sufrimiento del que somos testigos y que, como alternativa, nos acerca a una defensa del personaje de Nawal Marwan.
Suponemos que de modo confeso, el personaje original se inspiró en la violenta peripecia de la militante libanesa Soha Bechara, que estuvo 15 años recluida en una prisión de tortura por haber intentado asesinar, a los 21 años, a un líder militar del Ejército del Sur del Líbano. De ahí viene uno de los momentos más líricos del film, que es el sobrenombre épico de la reclusa como “la mujer que canta”. Con el canto como arma contra la pérdida del juicio, Marwan sobrevive a una década en su celda de aislamiento, a torturas, violaciones, embarazos y partos en la cárcel y a la separación de sus hijos.
Pero la tendencia gélida en la introspección al personaje y la violencia a veces gratuita de algunas escenas (en especial respecto a la muerte infantil), no acaban de llevarnos a que la historia cale hondo. La resolución se nos antoja un tanto excesiva y su cierre demasiado moralizante. La parábola de que en toda guerra víctima y verdugo comparten la misma piel es sin duda potente, pero el camino por el que la película llega a él es menos poderoso que su planteamiento, y los últimos minutos que le sobran al metraje, sentimos estar caminando sobre una cuerda un tanto floja.
En la entereza de la atmósfera de Incendies se echan de menos algunas cosas. La más importante, una banda sonora propia. Aquí, las melodías del grupo de rock Radiohead suenan fuera de lugar, desconcentran y animan a creer que el gusto dramático y la madurez de Denis Villeneuve fueron, en esta ocasión, justamente desbancados por los de Susanne Bier en los Oscar.
A pesar de la fortuna de Incendies de tener, ante todo, una gran historia por contar y de que quizás no nos estemos quejando de otra cosa que de la condición que articula su drama de principio a fin: la negación de la belleza.
Escribe Marga Carnicé
Título | Incendies |
Título original | Incendies |
Director | Denis Villeneuve |
País y año | Canadá, 2010 |
Duración | 130 minutos |
Guión | Denis Villeneuve, sobre la obra de Wajdi Mouawad |
Fotografía | André Turpin |
Música | Banda sonora |
Distribución | Alta Classics |
Intérpretes | Rémy Girard, Allen Altman, Lubna Azabal, Mohamed Majd, Baya Belal, Bader Alami, Yousef Shweihat |
Fecha estreno | 11/03/2011 |
Página web | http://www.sonyclassics.com/incendies/ |