SIEMPRE
HAY UN MAÑANA
Hemos
cumplido el primer año de vida real. Nuestra revista ya anda y muy bien,
aunque está mal que nosotros lo digamos, por cierto. La verdad es que
cuando “nacimos” nos acordábamos de nuestra anterior re-encarnación
(el “Encadenados” en papel
de los años ochenta), aparte, claro, que no es normal “empezar”
cuando ya se han cubierto 17 etapas en la red. Eso, como algunos sabéis y
habéis vivido con nosotros, es lo que nos ocurrió. El primer EN CADENA
DOS apareció casi como un juego hace unos tres años. Era la unión de
una serie de amigos que, por diferentes tiempos y de formas distintas, habíamos
caminado por los senderos cinéfilos. Creo que ninguno de nosotros había
pensado aposentarnos en la red. Una curiosa coincidencia fue la que nos
llevó a ello. El sentirnos demasiado “encadenados”, y con poco
futuro, fue lo que nos animó a dar el salto. En el número
correspondiente a junio del año 2000 decidimos cortar los lazos con quien
nos cobijaba. Necesitábamos sentirnos libres para caminar.
Varios
meses después, en febrero de 2001, aquello que soñamos era una realidad.
Nuestro era el dominio de la revista (seguía llamándose “Encadenados”
o “En cadena dos” pero ahora
nuestro encabezamiento en la red era otro, uno tan simple como éste que
os permite entrar en nuestros números mensuales) y el servidor. Para lo
malo y para lo bueno, para las críticas y los parabienes. En el
intermedio nuevos conocimientos, nuevos amigos, y una asociación cultural
cinematográfica. Y ahí, aquí, tenéis la ilusión de una obra trabajada
a diario desde la serenidad, la libertad y el rigor. Todo ello no sería
posible sin la gran aportación de dos personas: nuestro redactor jefe,
Sabín, que fue el encargado de diseñar la página y de seguir alimentándola
día a día, y nuestro informático particular, Dr. Sandman, que se
encarga de “colgarnos” en red y de solucionar todos los problemas que
van surgiendo, que no son pocos. Como simple anécdota os contaré que
(casi) coincidiendo con nuestra primera salida tuvimos la visita de unos
piratas informáticos que procedían, nada menos, que de la Europa del
Este... menos mal que Sandman trabaja duro por las noches.
En
menos de un año hemos conseguido prácticamente los objetivos que nos
marcamos. El principal ser conocidos. En estos meses hemos obtenido, hecho
muy satisfactorio, un número de visitas realmente importante que suponen
diariamente y por término medio, varios centenares. También se ha
aplaudido nuestra salida/existencia en diferentes medios tales como el
programa de Radio 80 “La gramola”, la revista “Cinemanía”, algún
magazine de cine televisivo... Algo que también ha ayudado a crear la
gran familia (que seguirá aumentando) de “Encadenados”. De los incorporados a ella habrá que hacer mención
a aquellos que nos escriben mensualmente y, sobre todo, a los que han
decidido caminar con nosotros colaborando en la revista. Es el caso, entre
los “encadenados” más cercanos, de Romaguera, Evaristo, Juan
Francisco Álvarez, Marcos... Gracias a todos, por creer en nosotros, por
seguirnos, por saber que no nos encontramos solos en este disparatado y
peligroso mundo en red.
Se
abre el nuevo año. Es simplemente una fecha que no indica más que un
cambio de guarismos. Las cosas siguen como estaban. El mundo no ha
aprendido después de tantos años de Historia. Tristemente es así. Los
“dictadores” de siempre (realmente no creen en nada ni en nadie que no
sean ellos) crean sus teatros infernales de odio apoyándose en sus
personales dioses. Tanto da que vengan de acá o de allá. Significan el
terror, el odio. Son insolidarios y ególatras. Piden a los otros que
mueran por ellos, desde sus fortalezas acorazadas por sus ejércitos,
policías o acólitos. Fanáticos todos, que imposibilitan la paz en un
mundo que exige, para lograrla, la justicia. No hay paz sin justicia.
Desde nuestra página tratamos de lograr, desde la búsqueda del buen
cine, ese mundo mejor al que todos tenemos derecho. Y que, por eso,
exigimos. Nuestra voz es pequeña, pero está llena de esperanza, porque
creemos en el ser humano, en lo que lleva dentro, en su sentido
esperanzador de trascendencia para la humanidad.
Cruzamos
la frontera de un nuevo año. Habrá que desear, lo ya indicado, justicia
y paz. Desde estas páginas intentaremos ayudar a ello. Nuestra revista
seguirá abogando por una cultura (la “encadenada” al cine) libre, que
estética y éticamente trate de alimentar las ansias humanas.
Año
que deja atrás el terrible guarismo de Kubrick. Nunca pudo llegar a
pensar que su fecha fuera tan desastrosa. Ahora pasamos a otra, capicúa
además, donde los problemas de ayer, lógicamente, siguen estando
presentes. La pantalla del mundo volcará las imágenes de la Historia. El
cine, las películas, seguirán desde el sentido (que no enfrentamiento)
arte-espectáculo que siempre le ha caracterizado, enviando señales y
mensajes (contradictorios muchas veces) a los millones de espectadores del
planeta. Nosotros, desde el siempre joven “Encadenados” trataremos de seguir luchando por la sensatez, la
libertad y el consenso, en la búsqueda de un cine siempre nuevo y
“sano”. No os prometemos muchas novedades, porque no nos gusta
prometer, lo que nos gusta es que recibáis. Y en eso estamos, en poder
ir, día a día, ofreciendo un “navegar” más satisfactorio.
Adolfo
Bellido López
(director
de EN CADENA DOS).
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